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Contexto natural
Unidad alimentación
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La estimulación o atención temprana consiste en proporcionar al bebé y al niño las mejores oportunidades de desarrollo físico, intelectual y social para que sus capacidades y habilidades le permitan ser mejor de lo que hubiera sido sin ese entorno rico en estímulos intelectuales y físicos de calidad. La estimulación temprana incluye un conjunto de actividades que pueden ser aplicadas desde el nacimiento hasta los 6 años del niño, franja de edad con mayor plasticidad cerebral.
La logopedia se ocupa de la prevención, evaluación, diagnóstico e intervención de los trastornos del habla, de la voz, de la audición, dificultades del lenguaje a nivel oral y escrito, trastornos en la deglución (alimentación) y problemas orofaciales, así como las alteraciones relacionadas con la comunicación y el aprendizaje..
La fisioterapia es la disciplina encargada del tratamiento de cualquier alteración que padezca o pueda padecer el niño en su desarrollo motor, en la percepción del movimiento, esquema postural o en su aparato locomotor, respiratorio, digestivo y nervioso. La intervención tiene como objetivo principal desarrollar al máximo las capacidades del niño desde su globalidad, adaptándonos a su individualidad y buscando que disfrute y participe de forma activa en el tratamiento. Es muy importante llevar a cabo una detección e intervención precoz, resolviendo y o reduciendo el problema.
La Terapia Ocupacional (TO) es una disciplina sociosanitaria que evalúa las capacidades físicas, sensoriales y sociales del niño para desempeñar con éxito las actividades de la vida diaria e interviene cuando dichas capacidades están en riesgo o dañada por cualquier causa. El TO utiliza la actividad con propósito (significativa para el niño) y el entorno para conseguir el máximo grado de autonomía e integración, en niños que tengan dificultades para participar en las actividades habituales en la infancia: juego, aprendizajes, autocuidados y habilidades sociales.
La psicoterapia es el tratamiento que tiene como objetivo el cambio de pensamientos, sentimientos y conductas. A través de este tratamiento el psicólogo trabaja reconocimiento y expresión de emociones, habilidades de comunicación asertiva, la tolerancia a la frustración, control de impulsos, estrategias de regulación emocional, fomento de la identificación, planteamiento y búsqueda de soluciones ante un problema concreto, de forma que se consiga mayor autonomía a la hora de resolver los problemas, el fomento de la autoestima y autocuidado, la restructuración cognitiva, así como pautas de técnicas de modificación de conducta para padres.
La neuropsicología estudia las relaciones entre cerebro y la conducta, así como sus implicaciones en la vida diaria a nivel cognitivo atención, memoria, lenguaje, percepción, funciones ejecutivas, etc.), emocional y conductual. A través de la intervención neuropsicología o rehabilitación cognitiva se estimula, rehabilita y/o compensa aquellas funciones en las que los niños presentan dificultades.
La psicomotricidad es una disciplina que, basándose en una concepción integral del sujeto, se ocupa de la interacción que se establece entre el conocimiento, la emoción, el movimiento y de su mayor validez para el desarrollo de la persona, de su corporeidad, así como de su capacidad para expresarse y relacionarse en el mundo que lo envuelve. Su campo de estudio se basa en el cuerpo como construcción, y no en el organismo en relación a la especie.
A través del tratamiento de habilidades sociales se promueve comportamientos dirigidos al manejo de la comunicación tanto verbal como no verbal dentro de una conversación. Saber cómo iniciar y finalizar una conversación, expresar y recibir refuerzo, introducirse en un grupo, poder presentarse a otras personas con facilidad, solucionar conflictos interpersonales. También, se trabaja el reconocimiento de las emociones, el juego, aprender a perder, respeto de normas y control de impulsos.
El TheraSuit se basa en los principios de la terapia intensiva y en el desarrollo de la fuerza muscular, previniendo los efectos de la inmovilización. Combina un programa de fortalecimiento intensivo para los niños a través del uso del traje y la unidad de ejercicios universal. El traje tiene como objetivo la estabilización externa y el refuerzo de los músculos débiles, proporcionar estimulación táctil y sensorial, corregir la alineación del cuerpo, recuperar patrones posturales y de movimiento correctos.
Intervención en contexto natural es un servicio que ofrece Adempa con el fin de proporcionar a las familias el apoyo que necesitan y dar solución a situaciones concretas que tienen lugar en el entorno natural del niño y la niña. Para ello acompañamos a las familias allá donde aparece la necesidad que hay que abordar. De esta manera, hemos acudido a casa para favorecer la comunicación, para estructurar su tiempo libre y evitar de esta manera conductas inadecuadas. Hemos intervenido en la calle, en los comercios, en el parque para mejorar el comportamiento y la comunicación. A través de un análisis de la situación se establecen los objetivos junto con la familia, interviniendo de una manera integral y holística. De esta forma, se proporciona a la familia las herramientas y las estrategias necesarias para abordar la situación que acontece. La frecuencia de la intervención se adapta a las necesidades de cada situación, pudiendo ser semanal, quincenal o mensual.
La Unidad de Alimentación está formada por logopedas especializados en Motricidad Orofacial y en Trastornos de la Deglución, centrados en población infanto-juvenil. El objetivo principal de esta unidad es detectar posibles dificultades en el proceso de la deglución para favorecer, así, que la masticación y la deglución se lleven a cabo de manera adecuada.
La intervención será de manera individualizada y se establecerá en función de la evaluación realizada anteriormente. Con este tratamiento, se busca conseguir un tono muscular adecuado de los músculos que intervienen en el proceso de la deglución, favorecer una correcta masticación durante la fase oral de la comida, establecer patrones adecuados de deglución, intervenir para que la deglución sea segura y eficaz, realizar transiciones entre las diferentes consistencias (paso del puré al sólido), introducir una variedad de alimentos para conseguir una alimentación más saludable, reducir los tiempos que el niño tarda en comer y disminuir el babeo. Asimismo, las familias tienen la posibilidad de acceder al tratamiento para que el profesional les paute y les oriente durante el proceso para que puedan trasladarlo a otros contextos.
